Las polillas de la ropa representan uno de los factores más consistentes en las pérdidas monetarias de las fábricas textiles. Continúa y conoce cada una de sus características y cómo prevenirlas.
El verdadero nombre de la polilla de la ropa es tinea pellionella. Esta es una de las polillas más resistentes en las temperaturas extremas. Este insecto es uno de los pocos que pueden de sobrevivir perfectamente en la época de invierno, por la calefacción.
Características principales de las polillas de la ropa
Son unas pequeñas criaturas que mide apenas 8 mm. Generalmente viven en casas o almacenes, pero también pueden vivir en nidos de pájaros. Así como se alimenta de prendas de ropa, también es muy posible que se alimente de otros elementos. Estos pueden ser pieles, de pelo de animal, entre otras cosas.
Una de las características de las polillas de la ropa es que viven en la oscuridad y no son atraídas por la luz. Esto a diferencia de la gran mayoría de polillas. Además, su vuelo es un poco torpe por lo que no les gusta alejarse de las zonas infestadas.
Son insectos que pueden llegar a convertirse en plagas por todo un año, pues su hábitat son las viviendas humanas. Y cómo prefieren la oscuridad por encima de la luz, se esconden cómodamente entre la ropa.
Es bastante común que no sepamos de su existencia, solo hasta que empezamos a notar los huecos en nuestra ropa. Solo con tener una pareja de polillas alojadas en nuestro armario, es suficiente para asegurar una buena plaga. La hembra pone un aproximado de 150 huevos.
Éstas generalmente viven 35 días, en los cuales generan destrozos bastante graves en tu armario. Sin embargo, estos días son aproximados, ya que depende mucho de la temperatura en la que se encuentren.
Las larvas, en este caso, son las que causan el daño, pues se alimentan de todo tipo de tejidos. Comen lana, pieles, cueros, seda, hasta plumas. Son capaces de dejar huecos en las telas y deshacer su estructura.
Los adultos de las polillas de la ropa no se alimentan
¿Cómo prevenir a la polilla de la ropa?
Ya que es una de las principales plagas a nivel mundial, es importante prevenir o eliminar a tiempo estas polillas. Principalmente, es importante mantener las prendas de ropa limpias y revisarlas constantemente. Detectar una pequeña población de polillas es mucho mejor que detectar una cuando ya es abundante.
Principalmente, mantener la ropa limpia es una de las cosas más importantes. Esto se debe a que es más probable que las polillas lleguen a prendas sucias que a las limpias. Por otro lado, al momento de guardar la ropa, asegúrate de hacerlo en bolsas herméticas, en los casos más extremos.
También es importante guardar la ropa totalmente seca. Para el caso de las telas, mantas grandes y abrigos es importante sacarlas al sol constantemente, además de cepillarlos. Como se sabe, las larvas no son atraídas por la luz brillante, así que se pueden eliminar con el cepillo.
Ahora, cuando la tela ya está infestada, lo más recomendable es desechar esta prenda dentro de una bolsa de plástico. Las que no estén afectadas aún, deben ser lavadas a una alta temperatura, o meterla varios días en el congelador.
Siendo esta una de las principales plagas a nivel mundial, es imperativo revisar la ropa de nuestros armarios. Realizar una inspección frecuentemente podrá evitar una infesta muy grande de polillas. A su vez, podrás evitar que tus prendas favoritas se vean afectadas por estos animalitos.